jueves, 17 de abril de 2014

El Mesón del Príncipe sí es particular



   Muchas personas que no lo conocen llegan al restaurante Mesón del Príncipe, en Camagüey, y realmente en su primera impresión no piensan que se trata de un negocio administrado por particulares o “cuentapropistas”, término genérico en Cuba para hablar de la iniciativa privada. Elegancia, distinción, sobriedad, una exquisita decoración que rinde tributo a la bella ciudad que lo acoge, constituyen el primer efecto de impacto visual en el cliente, a lo cual se suma luego una atención de alta profesionalidad y una comida de sabores únicos, de la cocina tradicional cubana y también de la internacional.
   Es difícil lograr esa combinación necesaria en un local de ese tipo, teniendo en cuenta que aún están irresueltas varias cuestiones imprescindibles para el pleno desarrollo de la pequeña empresa privada en el país. Por ello el cliente se asombra, y a la vez añora esa distinción en los restaurantes estatales, donde precios un poco más asequibles deberían ir acompañados de otros conceptos básicos de la hostelería y la restauración que el sector particular está asumiendo con fuerza y constancia, y el restaurante Mesón del Príncipe es uno de los que marca la delantera en Camagüey en ese sentido.  





 











sábado, 23 de febrero de 2013

Abierta en Cuba convocatoria para premio mexicano de poesía

    La convocatoria del Premio Internacional Manuel Acuña de Poesía en Lengua Española quedó abierta hoy para Cuba, primer país donde la Secretaría de Cultura del Estado de Coahuila, México, realiza el lanzamiento de forma presencial.
   Odila Fuentes Aguirre, coordinadora de Literatura en esa cartera de gobernación, precisó que en otras naciones se anunció a través de las embajadas, pero consideró a la XXII Feria Internacional del Libro cubana como espacio ideal para abrir el concurso.
   El evento se prestigia con gran cantidad de escritores y editoriales de varias latitudes, y en materia de creación, la Isla caribeña es un terreno fértil para la prosperidad de las intenciones del certamen, pensado para todos los autores de habla castellana, precisó la funcionaria.
   Acotó que el Premio, convocado por primera vez, persigue un retorno de la mirada del mercado de publicación hacia la región natal del poeta Manuel Acuña, representante del Romanticismo del siglo XIX en la tierra azteca, que se quitó la vida a los 24 años por un amor no correspondido.
   Fuentes Aguirre recordó durante la presentación los puntos comunes en la vida del bardo mexicano y el cubano José Martí, pues este último también amó, sin reciprocidad por parte de ella, a la joven Rosario de la Peña, objeto de la pasión tormentosa de Acuña.
   La cuantía monetaria del galardón, único e indivisible, asciende a 100 mil dólares, además de la publicación de la obra, que será un cuaderno de poesía de entre setenta y 100 cuartillas, inédito, con tema y forma libres, según referencian las bases de la competición.
   Textos en proceso de contrato o publicación, premiados en otros concursos, en espera de dictamen, o de la autoría de trabajadores adscritos al Gobierno del Estado de Coahuila o al Consejo Nacional para la Cultura y las Artes mexicana, instituciones convocantes, no serán admitidos.
   El plazo de admisión vence el 21 de junio de 2013, y en diciembre próximo se premiará al ganador, en la ciudad de Saltillo, Coahuila.    

La esposa de Chavarría

   Entre tantos homenajes dedicados a Daniel Chavarría en la XXII Feria Internacional del Libro Cuba 2013, tal vez pocos reparan en una figura menuda y diligente que corre detrás de él por toda la Fortaleza de San Carlos de la Cabaña.  
  Hilda Sosa Saura es la esposa de Daniel, como a 
ella le gusta llamarlo, y luego de 30 años de matrimonio, en la pareja se justifica plenamente ese refrán que afirma que detrás de todo gran hombre, hay una gran mujer.
   En las novelas firmadas por el destacado escritor, ella ha dejado parte de su esfuerzo, porque como aseguró el propio Chavarría, aporta la mirada crítica de la cual él carece y a la que agradece gran parte de su éxito.
   Incluso Viudas de sangre, uno de los textos más reconocidos del autor cubano-uruguayo, le debe a una creación de su mujer llamada La costura habla, calificada en aquel entonces jocosamente por el Premio Nacional de Literatura como una “noveletica náif”, pero de la cual aprovechó sus personajes.
   La ya jubilada profesora de la Universidad de La Habana comentó que lee todas las obras de su esposo, busca información para él, intercambia con los editores de los libros para que salgan impecables, y hace todo lo necesario para apoyar a quien ha sido y es su gran amor.
   Confesó, como novia enamorada, que aún lo cela cuando en sus presentaciones en público alguna bella dama se acerca interesada en la personalidad del escritor, que para Hilda es luminoso, simpático, inteligente, culto y maravilloso, pero también exaltó la dicha de una existencia vivida a su lado.
   Quizás en la próxima feria, cuando posiblemente salga a la luz el primer libro de la esposa, “La Habana de Chavarría”, los asistentes a La Cabaña vean al escritor correr detrás de Hilda para apoyarla, mientras ella se roba el protagonismo en las presentaciones.